Sí. Nadie más se ve tan deseable como tú en ese traje oscuro. Nadie más posee tal poder de seducción como tú cuando te presentas con esa -no- sonrisa gris. "I love how you wear it" galantería de etiqueta. Todo a tu alrededor termina convirtiéndose en ese perfume exquisitamente artificial. Yo, en la inercia, me quedo esperando a que des la vuelta y me señales las coordenadas hasta tu mundo antes de perderte en el mío. Porque lo mío va más allá de ese típico ritual con envoltura de satín, más allá de las palabras acostumbradas y bailes conocidos. Aburrida de ese escenario, escapo, deseando que encuentres algo más en ti que tu aburrido arte de sexducción.
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Dedicado al muchacho de todas para todas las noches.
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